DIPUTADO MERINO: “SEGUIRE OPUESTO A LEYES DEL TLC”

Entrevista publicada al Diputado José Merino del Río, publicada en La Nación, 26 de agosto de 2007

PERIODISTA: Ismael Venegas C.

Él mantendrá esa posición hasta que el Ejecutivo reconozca que las leyes paralelas son parte del TLC. En ese caso, si gana el NO, los 13 proyectos deben archivarse. Si triunfa el SÍ, votará en contra, pero tomará en cuenta el resultado del referendo.

¿Qué puede pasar en las sesiones que se inician en setiembre a sabiendas que hay tres leyes paralelas en los primeros lugares del plenario?

Creo que si el Gobierno, y su grupo parlamentario, actúan con la misma lógica del período de extraordinarias (agosto), tendrían que ver cómo congelan esos proyectos. De lo contrario, esto es inevitable que se crispe.

¿Fue una decisión acertada la del Ejecutivo congelar las leyes paralelas al TLC en agosto?

Dentro de los cálculos de ellos, sí, en el sentido de que tener un Parlamento conflictivo, de cara al referendo, les podría perjudicar, más que
ayudar.

El Ejecutivo cedió, ¿era el momento propicio para llegar a un acuerdo con los partidos del NO sobre el trámite de las leyes paralelas al TLC?

El Poder Ejecutivo se dio por satisfecho reuniendo a los 38 diputados.

“El Ejecutivo pudo haber aprovechado la oportunidad para enviar algunas señales más claras, pero fíjese que, como dicen, no es ni chicha ni limonada, porque dicen: no seguimos viendo la agenda paralela, pero si perdemos el referendo, seguimos (con la agenda paralela al TLC).

“Cuesta entender cuál es la estrategia política de esto, porque en todo caso, a mí me deja en total libertad e independencia”.

¿Cuál será la posición de José Merino respecto a las leyes paralelas si gana el SÍ?

Seguiremos oponiéndonos. Nuestra posición en esto es la misma que la del Ejecutivo: el Ejecutivo dice que si gana el NO, ellos siguen adelante con la agenda de implementación.

“Nuestra posición es que si gana el SÍ, seguiremos combatiendo una agenda, a la cual consideramos negativa.

“Si hubiéramos llegado a un compromiso más claro, de cara a la sociedad, probablemente hubiéramos valorado la situación”.

¿Un compromiso del Ejecutivo en qué términos?

Si el Ejecutivo dijera, lo cual no sé si es tarde ya porque sería una medida oportunista electoral, señores: el pueblo no solo va a decidir el TLC, si no una agenda, que reconocemos que es parte del TLC.

¿Cuál debe ser el compromiso del Gobierno?

Que diga claramente que vamos al referendo a decidir la suerte del TLC y de la agenda de implementación y que el Gobierno se compromete, si es derrotado en el referendo, a no revivir en la Asamblea Legislativa ninguno de los proyectos de la agenda de implementación del TLC.

¿Y si gana el SÍ?

Bueno, si gana el SÍ, obviamente aceptamos que tendrá consecuencias para la agenda de implementación y que, votándola en contra, nuestra oposición tendrá que tomar en cuenta el resultado del referendo.

¿Hay alguna posibilidad de acuerdo entre Merino y el Gobierno sobre los escenarios del SÍ y del NO en el referendo?

La cuestión es que, a medida que se calienta la campaña electoral, el margen de confianza se restringe.

Usted dice que aceptará la decisión popular si gana el SÍ; sin embargo, esa aspiración no se puede concretar si no se aprueban las leyes paralelas...

La aprobación de las leyes de implementación es una responsabilidad del grupo que las respalda. Pero el tema es que el mismo Gobierno nos está diciendo que las leyes no son lo mismo que el TLC, por lo que tendrán su propio trámite.

“Nosotros vamos a aceptar el resultado del referendo y la decisión democrática del pueblo la vamos a respetar, nos guste o no el resultado”.

Se acepta el resultado en caso de ganar el SÍ, pero se impediría la vigencia del TLC...

Bueno, más bien le preguntaría al Gobierno: ¿está el Gobierno de acuerdo con que la agenda de implementación es lo mismo que el TLC?

¿Y qué tiene que responder el Gobierno?

Obviamente que las leyes paralelas son lo mismo que el TLC.

¿Y si el Gobierno contesta que son lo mismo?

Primero que me conteste.

¿Si gana el SÍ?

Nos atendremos a las consecuencias.

¿Y si gana el NO?

El Gobierno tendría que archivar las leyes paralelas.

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